lunes, 1 de octubre de 2012

El mono y el escorpión...



Una vez, en alguna parte, leí una historia. Hablaba de un mono y un escorpión. Habiendo llegado a la orilla de un gran río, el mono decide atravesarlo a nado. Apenas ha metido una pata en el agua, oye una vocecilla que lo llama. Mira alrededor y, a poca distancia, ve a un escorpión.

“Oye –le dice el escorpión-, ¿serías tan amable de llevarme?”

El mono lo mira fijamente a los ojos.


“No tengo la menor intención. Con ese aguijón podrías atacarme mientra nado y hacer que me ahogue”.

“¿Por qué iba a hacerlo? –responde el escorpión-. Si tú te ahogaras, también moriría yo. ¿Qué sentido tendría?”

El mono piensa un poco y le dice: “¿Me juras que no lo harás?”

“¡Te lo juro!”

Entonces el escorpión sube a la cabeza del mono y el mono empieza a nadar hacia la otra orilla.

Cuando está casi a la mitad, siente de pronto un pinchazo en el cuello. El escorpión le ha picado.

“¿Por qué lo has hecho? –grita el mono-. ¡Ahora moriremos los dos!”

“Perdona –responde el escorpión-, no he podido evitarlo. Es mi naturaleza”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario